EL ENCUENTRO DE GUAYAQUIL
2.0San Martin y Bolívar de carne y hueso

Si el principal interés del realizador Nicolás Capelli, también coguionista y colaborador de investigaciones con Pacho O’Donell,  en cuyo libro se basa, fue mostrar tanto a San Martin como a Simón Bolívar lejos del bronce., su objetivo destinado a la más sana polémica está cumplido. Ellos se ven seres humanos debatiéndose con sus demonios y ambiciones, que se enfrentan en   reuniones secretas donde se sella el destino del dominio español en América Latina. En la historia oficial siempre se habló de misterio sobre ese encuentro, pero también sobre el  inexplicable renunciamiento de nuestro héroe máximo. El revisionismo histórico tiene aquí la palabra convincente. Como hecho cinematográfico, sin dudas ambicioso, el director no puede escapar del todo a lo que suele ocurrir con nuestros temas históricos, una solemnidad  que contradice las intenciones, y deja librados a su suerte a los empeñosos actores Pablo Echarri y el colombiano Anderson Ballesteros, en registros distintos. Y el numeroso elenco se pierde con pocas escenas cada uno. Pero aún con esos problemas, el filme resulta interesante y valioso.

Sobre El Autor

Editora General

Periodista de Espectáculos. Trabajó en Canal 13 durante 25 años y en medios como Canal TV, Antena y Radiolandia 2000; en este último ocupó el cargo de directora. Acredita una vasta trayectoria en: radio Rivadavia, Radio Mitre, Radio Continental y la señal de cable TN donde condujo durante diecisés años el programa “TN Show”. Entrevistó a grandes figuras locales e internacionales y realizó para la Argentina la cobertura de los premios Oscar. Autora del libro "Los hombres del deseo". Es miembro de Aptra, Ace y jurado invitado de los Premios Clarín Espectáculos.

Artículos Relacionados

  • 4.0Una distopía que muestra una guerra interna que destruye a EEUU
  • 3.0Un futuro donde la Inteligencia artificial reeduca a los humanos
  • 3.0La salud mental en primer plano en un film sobre el crecimiento adolescente
  • 3.0Un desastre inolvidable con la mirada de la ética y la codicia