Es una película de Palestina que cuenta la historia de superación personal, sacrificios y sueños de un niño con una hermosa voz que se transforma en el ganador de Arab Idol, y se transforma en motivo de alegría para todo su pueblo, porque la suya fue la primera vez de un participante que había nacido y fue criado en la franja de Gaza. Precisamente ese telón de fondo diferencia a esta película de tantas vistas en carreras del espectáculo. La escasez, la vigilancia, la estrechez de una vida cercada, en ahogo de una vida sin más horizontes, las injusticias, la pobreza que llevo a la muerte a su hermana por deficiencia renal. Lo demás es una narración convencional que le da a la participación en el programa mas globalizado del mundo, el concurso que nació como “American idol”, una importancia desmesurada, cuando mucho ya conocemos de los mecanismos de ese concurso y de su condición caníbal en muchos aspectos. Para esta historia real de Mohammad Assaf, que tuvo que salir clandestinamente de su tierra significo la fama, ser considerado embajador de buena voluntad de las Naciones Unidas con pasaporte diplomático pero para regresar y salir de Gaza todavía necesita un permiso especial.
Un relato emotivo y convencional en circunstancias especiales.
https://www.youtube.com/watch?v=bcVsvShFSUY