El joven director Xavier Legrand, retoma el tema de un corto suyo nominado al Oscar, para hablar de una pareja que se separa en la instancia judicial: Una madre que pierde la custodia total de su hijo menor, la mayor tiene edad emanciparse, que argumenta que su hijo no quiere ver a su padre por violento. No puede probarlo y la custodia pasa a ser lo que indica el título. La inteligencia del director, es armar un suspenso inquietante donde todo lo que ocurre con los adultos, no pone a la mujer como víctima total ni a su ex marido como un monstruo. Detalles de manera de actuar, donde el pobre adolescente es manipulado, y sufre tener que mentir, Sin embargo, poco a poco, inexorablemente se va rebelando en una espiral de violencia incontenible. Cuando uno recuerda los detalles, entiende la inteligencia con que fue armado el argumento del propio director, que muestra la fría justicia que no es eficaz en sus manejos burocráticos, con abogados hábiles, pero que cuando deja a los protagonistas a su suerte el resultado casi siempre es nefasto. Contundente, sin sutilezas, pero con una precisión que pone los pelos de punta. Grandes actores, Lea Drucker, Denis Menochet y el jovencísimo Thomas Gioria para dar vida a personajes torturados por una realidad inapelable.