Dirigida por Michael Chaves (que hará “El conjuro 3” para el 2020) de la mano del productor James Wan (que dirigió las dos primeras de “El conjuro”, “Rápido y furioso 7”) llega la cuota de terror de la semana con el soporte de una de las leyendas populares más famosas de la cultura mexicana, similar a nuestro “hombre de la bolsa” como terror infantil. Aquí se trata sobre una mujer del siglo pasado, que mata a sus hijos para castigar la infidelidad de su esposo y arrepentida ante su propio horror vaga por el mundo, como una aparición, apropiándose de hijos ajenos, transformada en un fantasma horripilante, vestida de novia y con un llanto que es mejor no escuchar. Es un film de género, que no se amiga con las sutilezas, que prefiere los golpes de efectos que mantendrá a la audiencia adicta a estas emociones, lo suficientemente sobresaltada y entretenida. Una viuda, madre de dos hijos, asistente social, recibe una denuncia sobre una mujer mexicana que conoce, que tiene encerrados a sus hijos en un armario. Sorda a las súplicas de esa madre desesperada libera a los niños. Así atraerá sobre si dos maldiciones juntas, la de la llorona en cuestión y la de esa madre que la culpa por la muerte de sus hijos. Doble trama con exorcista incluido, apariciones, vientos que abren puertas y ventanas, y otras situaciones de miedo.