AMIGAS EN UN CAMINO DE CAMPO

“…Las cosas que entran/  en una mano/ eso es lo que tengo para armar un mundo” parte de la poesía que se recita en el film, que pertenece a Roberta Iannamico, que es de la zona del sur de Buenos Aires donde se hizo el rodaje, parece y merece inspirar esta película tan especial de Santiago Loza. El material que maneja, con tanto cuidado como para no contaminarlo, es el que construye una amistad entre dos mujeres. Ellas caminaran incansables, con la escusa de encontrar un meteorito que cayo cerca la noche anterior, para compartir lo que les queda: las anécdota que las unieron con otra mujer que  ya murió, cuando eran la “santísima trinidad”, las pérdidas, la soledad, la independencia, los planes no cumplidos, la esperanza de un viaje, la filigrana de los sentimientos verdaderos, el pulso de las emociones profundas. Loza construye los caracteres de las protagonistas con la delicadez y fluidez de su lenguaje, fascinando por el mundo femenino. Eva Bianco y Anabella Bacigalupo son las entrañables protagonistas, ásperas y frágiles, siempre contundentes. Las canciones  especialmente compuestas por Santiago Motorizado y la fascinación del paisaje contribuyen a la atracción de esta película tan especial.