Es una forma de revalorizar el mundo espiritual y los derechos del pueblo Mapuche, desde una relación durante muchos años entre un muchacho universitario dispuesto a demostrar su tesis sobre Roca y la conquista del desierto y la visión de su chofer, abogado de su comunidad local. En el comienzo el universitario solo desea probar que gracias a esa conquista del desierto la Patagonia ingresa al mundo de la modernidad, mientras que su compañero de ruta le muestra otra realidad, los mapuches llevados y reducidos, ofrecidos como mercancía esclava, con total ignorancia de sus saberes. Convence al joven e inician una amistad profunda. Diez años después el viejo mapuche llama a su amigo para que lo ayude y lo deje morir entrando por una puerta de una ciudad fantasma que aparece en un pliegue del tiempo. Rodada en Neuquen, demasiado discursiva por momentos, tiene la particularidad de valorizar un mundo de creencias y derechos mapuches que preferimos ignorar.