Es un film que se compromete con su base en un hecho real, un crimen ritual horrendo llevado a cabo por una secta, pero a la vez plantea sus consecuencias desde el más íntimo plano familiar. Los directores y guionistas Camilo Becerra y Sofía Gómez tomaron un caso que conmocionó a la sociedad chilena, un bebe sacrificado en un ritual macabro, que investiga la policía y pasa a manos de la justicia, pero a la vez se adentra en el mundo de las mujeres implicadas, y en la indagación del fanatismo y la manipulación. Entre una madre que es una famosa psiquiatra que recibe en su casa a su hija mayor, con la que había perdido contacto, que es acusada de haber entregado a la muerte a su beba recién nacida. Una mujer que queda frente a una joven que casi no conoce, con la que se siente culpable, pero no deja de profundizar en lo que realmente ocurrió, además de la batalla legal con los padres de otras jóvenes implicadas chicas cooptadas. Es una película que desarrolla el peligro de la locura del sectarismo pero también la fragilidad humana que puede caer fácilmente en su trama de locura alienada. Con grandes actriz y un rigor dramático contundente, la historia se desarrolla como un policial pero a la vez no deja de poner la lupa sobre solidaridades y abandonos familiares.