Laurent Cantet, con el guión de Robin Campillo y el propio director, que se ocupa de la educación como en “Entre muros”. Pero en este caso con un taller literario, dictado por una escritora famosa a un grupo de seleccionado de estudiantes. En una primera parte esos chicos representan la composición de la sociedad francesa actual, con musulmanes, inmigrantes africanos, un chico con cierta simpatía por la extrema derecha, que discuten con la excusa de buscar el argumento de una novela sobre su ciudad, Ciotat, cercana a Marsella y Toulon. Al invocar recuerdos familiares reviven lo que fue ese puerto, un astillero importante que daba muchos puestos de trabajo, las luchas obreras y la comparación con la actualidad, un lugar olvidado que a lo sumo construye embarcaciones para gente muy rica. Pero también se discute sobre literatura, sobre el papel de la profesora, la importancia de la creación. En la segunda parte comienza una tensión muy especial entre la profesora y ese alumno que no concuerda con nadie, que gusta de las armas, que la espía, en un punto la acosa y amenaza. Construida con talento e inteligencia, con un suspenso que replica esa novela hecha a varias manos, con un fuerte ingrediente sexual y misterioso. Atractivo e interesante filme.