El documental de Florencia Mujica y Daniel Najenson que cuenta con la participación de Sonia Sánchez, una militante anti-trata y referente feminista, esta realizado en nuestro país y en Israel, y echa luz sobre una historia que siempre tuvo el secreto y la complicidad de la corrupción y el poder como aliados. Es la trata de mujeres llevada a cabo por una organización mafiosa de judíos polacos que a principios del siglo pasado traía mujeres europeas para prostituirlas. Eran chicas engañadas con promesas de casamiento que era cruelmente explotadas y rematadas. Se trata de la temible Zwig Midal, que se instala en nuestro país y luego son expulsados de la comunidad judía. Miles de mujeres explotadas y desaparecidas, de las que solo quedan cartas archivadas en Tel Aviv con pedidos de auxilio. Esa organización criminal que tenía una fachada adecentada con sus integrantes que pasaron a ser los impuros del titulo, y esta historia con los ojos de hoy, son los que muestra esta investigación valiosa.