Gerardo Romano
Dueño de un sentido del humor corrosivo, en los últimos días abandonó programas en vivo, se peleó cuando lo tomaron de referente obligado con el ya famoso video de “la rosadita”, autor de dichos que provocan polvaredas en las redes sociales, con hogueras difíciles de apagar, acusado de soberbio, aplaudido e insultado, él sonríe con sarcasmo y puede decir muy suelto de cuerpo “Que Cristina vaya presa”. Pero también es el protagonista de un espectáculo “Un judío común y corriente” que ahora está en el Chacarerean Theatre, un unipersonal que bucea en el horror del holocausto judío, la barbarie nazi, la moral cínica de la actualidad. Una obra de visión más que recomendable. En “Agarrate Catalina” por Radio Ciudad (@laoncediez) tuvo una charla que vale la pena volver a escuchar: