Es un filme italiano de Mimmo Calopresti, que se ubica en Calabria a fines de los años 50, y que quiere poner luz sobre los pueblo olvidados, sobre los pequeños conglomerados aislados, a los que considera la tierra de los últimos, los ciudadanos de segunda, olvidados por el estado que nunca cumple sus promesas y bajo el dominio de jefes feudales abusivos y dictatoriales. Para contar esta historia basada en el libro de Pietro Criaco, el director junto a Verónica Zapelli decidieron un estilo de cuento de hadas, por momentos bellos y emotivo, con bailes y disfraces, festejos y alegría colectiva, pero como centro de todo la oscuridad de una lucha desigual por los derechos de un mundo obligado a ser arcaico, donde los pobladores no pueden ejercer sus derechos mínimos. La anécdota de una parturienta que no puede dar a luz y muere en el intento de ser llevada a un centro asistencial, trasladada a pulso por caminos de montaña casi imposibles de transitar, despierta la rebeldía. Cansados de reclamar un médico y un camino, los habitantes del lugar comienzan la tarea de hacer una carretera con sus propias manos. la odisea que los lleva al enfrentamiento con los poderes e intereses. Una película con bellos momentos emotivos, engarzados como escenas independientes, con los de lucha, con un elenco encabezado por Valeria Bruni Tedeschi, resulta un relato épico y conmovedor.
ASPROMONTE
ASPROMONTE
3.0Los pueblos olvidados por todos que despiertan a la rebeldía