Es una obra que propone una premisa original: “Los viejos son los verdaderos soñadores”. Lo dice su protagonista, lo demuestra el texto, son los ancianos los que tienen el tiempo, la libertad, el deseo de ser capaces de apoderarse de la imaginación. La acción se centra en un hombre mayor en dos momentos cruciales: Cuando tiene la valija lista para irse a un geriátrico, una decisión personal que su hijo no pelea por revertir y su vida en ese lugar. Siempre su rico mundo le permite imaginar diálogos con quienes no están y expresar ideas y verdades bellas, originales y lacerantes. Pero en el terreno de la realidad quedan siempre pendientes lo no dicho, los sentimientos no expresados.
Quiénes
Autor: Furio Bordon
Actores: Federico Luppi, Susana Hornos, Ramiro Vayo.
Dirección: Susana Hornos
Dónde
Centro Cultural de la Cooperación, Corrientes 1543
Por qué sí
Porque Federico Luppi, que se entero de esta obra por una nota donde contaban que fue la última que hizo Marcello Mastroiani, investigó y compró los derechos, nos conmueve hasta los huesos con su actuación. Un hombre enfrentado a sus recuerdos, a su lógica implacable, a su poder de observación. Que acepta con lucidez conmovedora una realidad a la que es condenado por una sociedad que descarta a los mayores, negándoles casi todo. Esta obra funciona como un poderoso cuestionamiento y una revalorización de los humanos en los años más sabios. La directora Susana Hornos con un rol que aporta humor y condescendencia, propone esta mirada intensa y necesaria.
En primera persona
Susana Hornos y Federico Luppi
Fragmentos de la obra