La reposición de este espectáculo no se puede dejar pasar. Una joya ya probada que vuelve a relucir con su redondez conceptual, su contenido poético, su protagonista soñada, su director señalado. Subtitulado como “un melodrama musical”, con una definición que no podía ser más exacta. La historia de esta modista modesta que vive resignada a su soledad, que recibe como el gran acontecimiento de su vida un pedido nada menos que de su admirada Libertad Lamarque llega al paroxismo cuando otro destino se cruza en su vida. El deseo de Eva Duarte que le pide ese mismo vestido. Una encrucijada de hierro para una mujer que danzaba entre la crítica y la admiración de una estrella. Y la llegada del poder instalado en su vida, transformándola en una llamarada.
Quiénes
Autor: Santiago Loza
Actores: María Merlino
Escenografía: Flor de un Día
Vestuario: Valentina Bari
Iluminación: Fernanda Balcells
Música: Sandra Baylac
Dirección: Diego Lerman
Donde
Santos 4040, Santos Dumont 4040. Capital
Por qué sí
Porque Silvia Merlino parece haber nacido para este rol. Dueña de un talento inusual, con todas las sutilezas a su alcance, con todos los colores de la paleta emocional para vestir a esa mujer acunada en la rutina frente a un acontecimiento extraordinario que la pone frente al objeto de su admiración. Y luego ante un dilema que la excede con el poder en juego. El texto de Loza cala profundo en lo poético y en la observación, en la construcción del drama y una única solución, en los detalles y el todo de una época con resonancias en el presente. Ese material y esa protagonista en manos del talentoso director conjugan un espectáculo que roza la perfección y se instala en la leyenda. Para volver a ver, para no perdérselo.
En primera persona
María Merlino
Fragmentos de la obra