El horror de los años de plomo en nuestro país, en Chile, el exilio obligado, la sobrevivencia, pero esta vez desde el punto de vista de una generación de niños que creció en el lugar receptor y que tienen una mirada muy distinta. Sebastián Kohan Esquenazi indaga sobre la vida de los niños, hoy adultos, que residieron en la comunidad de Villa Olímpica, un complejo de 30 edificios, 904 departamentos y 3000 exiliados, en ciudad de México. Y deja de lado la militancia y las reivindicaciones políticas que pasan a segundo plano. Un exilio al revés. De niños que crecieron, se hicieron amigos, que tuvieron padres que recordaban el horror o quienes prefirieron el silencio y trataron de adaptarse a esa nueva sociedad, sin espíritu de ghetto. Los argen-mex como se define en un testimonio sufrieron con el regreso a los países de origen porque extrañaban a sus amigos, porque tuvieron que readaptarse, porque quedaron entre dos mundos. Un muy interesante trabajo.
VILLA OLIMPICA
Etiquetas: