Eduardo “Teddy” Williams crea su propio universo de expresión que se escapa de leyes, usos y costumbres del mundo cinematográfico. Con su cámara panorámica de 360 grados, con sus múltiples objetivos desafía convenciones y se sumerge en lo surreal y rupturista. Va de un país a otro (Sri Lanka, Perú, Taiwan) con grupos de jóvenes en eterna búsqueda, girones de conversaciones donde se convoca al deseo, la necesidad de cambio, sueños de futuro, búsqueda de caminos. Como si saltar de un mundo real a otro virtual, con efectos que hacen pensar en las computadoras cuando desintegran una imagen, con un caleidoscopio de idiomas, personajes, momentos pacíficos y otros de eterno movimiento. Hay quienes dicen “que flotan en su propio lago” o que no saben si lo que dicen “lo escuché o lo pensé”. Imágenes de un mundo propio, distinto y seductor (###)
DOCUMENTAL (Con leyes propias y personales, caminos surrealistas y seductores)