Película destinada a la polémica, a ser amada u odiada, calificada con duros epítetos o ponderada como una genialidad. Dicen de ella, como el mayor reparo, que se mete con mirada europea y superficial sobre el tema de los desaparecidos, las víctimas del narcotráfrico, un flagelo desgarrador y profundo, y encima con un musical. Y que además transcurre casi todo el tiempo en Mexico, se filmó muy poco allí, y que salvo unas pocas excepciones no contrataron actores mexicanos, y que Selena Gomez chapurrea un castellano rarísimo. Quienes no la quieren la atacan de raíz. Sin embargo recomendamos entrar en su código de melodrama desquiciado y musical, con un argumento que habla de violencia extrema, de necesidad de cambio y de un camino de rodención, en un tono de telenovela exagerada, delirante y desquiciada que se disfruta cuando se entra en su código. La historia de un narco implacable en proceso de transición que contrata a una abogada insatisfecha y capaz para terminar su proceso y ser mujer ya promete mucho. Y luego la culpa, la necesidad de pagar su cuenta de sangre y mil enredos con sus hijos y su ex esposa, permiten matices sorprendentes de un director, Jacques Audiart, que se rebela como un creador que no teme tirarse a fondo con sus elecciones creativas. Ya solo por eso, para sacarse el sombrero. No se deje intimidar por virulencias exageradas y ni expectativas también desmesuradas Los trabajos de Zoe Saldaña (acaba de recibir un Golden Globe), la única Karla Sofía Garzón y vale también el enorme esfuerzo hecho por Selena Gómez . Dejarse llevar y disfrutar de una película que no permite indiferencia (####)
MELODRAMA MUSICAL ( Un delirio creativo de culpas y redención que hay que ver)