Es la protagonista de la película “La vida invisible de Eurídice Guzman” y se llama Carol Duarte. Una joven actriz que participó de manera brillante en el Foro con Perspectiva de Género y que abogó por ejemplo por humanizar los castings, en especial los de las mujeres, “una forma de crueldad que ya desde el vamos se ejerce con las aspirantes” En la película que participa de la Competencia Internacional del festival está dirigida por Karin Aïnouz, un director, guionista y artista plástico nacido en Brasil, que hiso su primer película “Madame Satä”, que ganó el premio en la sección “Una cierta mirada”. Ambientó la historia que co-escribió con Murilo Hauser e Inés Bortagaray, en Río de Janeiro en los años 50, donde dos hermanas sueñan con huir de esa casa y de un padre machista, según las reglas de la sociedad patriarcal. Una quiere seguir al hombre de sus sueños. La otra cumplir sus sueños de ser una gran pianista e ir a estudiar a Viena. Para las dos el destino es adverso y las mentiras de la apariencia inventadas por su padre y apañadas por su madre lo único que hacen es separarlas. Si bien es un melodrama, esas mujeres no se resignan al llanto, al destino, son guerreras, no dan tregua y se reinventan la vida. El film es uno de los que más aprobación logró en el Festival. Carol Duarte nos habla de su rol, ella es en la ficción Eurídice Guzmán. ”Ella tiene como muchas mujeres de la sociedad patriarcal un destino de sometimiento. Lo más interesante que plantea la película, además de mostrar esa inmensa tristeza que les provoca no vivir en contacto las dos hermanas, es que ninguna de las dos se queda quieta, sin reclamarle a la vida una situación mejor. En los años 50 en la sociedad brasileña las mujeres eran meros objetos de placer para los hombres, reproductoras, sumisas a la voluntad del padre o del marido. El rol de la madre es tremendo, es definido en un momento como una sombra al lado del padre de familia. Una de las cosas que amé de Eurídice es el empecinamiento por encontrar a su hermana y la persistencia en lograr su sueño para convertirse en una gran pianista. Para las dos la llegada de los embarazos es un problema porque ellas no decidieron cuando querían ser madres, no pudieron decidir sobre sus cuerpos.”
Para Carol que se hizo muy famosa en Brasil por interpretar a un personaje trans en una telenovela, el compromiso es moneda corriente. Se define como feminista, miembro de la comunidad LGTB, partidaria de la campaña por el aborto seguro legal y gratuito en nuestro país, señala que su personaje quiere abortar clandestinamente “pero una red de solidaridad masculina le impide lograr su objetivo”. Cuando habla de su país es crítica con su actual gobierno “Bolsonaro censura obras con temáticas LGTB, intenta terminar con el Instituto de Cine, ataca la cultura y la educación. Desde la cultura tenemos que resistir y luchar por impedir sus deseos”
Cuando vuelve a su personaje Eurídice asegura “Me inspire mucho en mi abuela, en el tiempo que ella vivió, en la diferencia con la actualidad, yo puedo decir lo que pienso, ella no pudo. Por eso las luchas feministas son tan importantes”. Carol Duarte es una estrella sin dudas, por eso le preguntamos por su futuro, por su sueños y contesta alegre y segura “ Me encantaría filmar en Argentina”
