MOONFALL

A los que les guste el cine catástrofe aquí tienen un muestrario de calamidades, maremotos provocados por el acercamiento de la luna, Incendios, terremotos, falta de oxigeno, abismos que parten la tierra y otras lindezas, pero también dos catástrofes de ataques en el espacio. La primera algo misteriosa, la segunda más explícita. Todos saben que Roland Emmerich se autocoronó rey de las películas de desastres, porque se congeló la tierra, porque atacan los alienígenas, por la rudeza de la prehistoria. También se sabe que se preocupa poco por la formulación lógica, los buenos diálogos, el perfil de los personajes. El va a los bifes. Aquí no solo dirigió sino coescribió el guión con Spenser Cohen y Harald Kloser, y decidieron mezclar de todo un poco. La luna va a chocar con la tierra porque se salió de su órbita. Y no es que “no miran para arriba” sino que en el sálvese quien pueda no hay políticos y si militares que buscan soluciones extremas y se detienen por situaciones ridículas. Para no espoliar digamos solo que en la luna pasan cosas que se mantuvieron ocultas a la opinión pública, “es una verdad de la película” aunque usted no lo crea y piense como se puede sostener semejante idea. Para salvarnos están un astronauta injuriado y despreciado, una mujer que queda a cargo de la Nasa, y un nerd que supo la verdad nunca revelada. Usando tecnología antigua se van a la luna en una misión extrema. Que hacen con sus personajes Halle Berry, Patrick Wlson y John Bradley? Lo que pueden con el hueso que les tiraron. Porque al dire solo se importa la acción y las historias personales con situaciones simplistas e increíbles son como la verdurita de la brochette, la carne es la acción. En materia de efectos especiales nada nuevo. Lo mejorcito está en la austeridad final. Pero no alcanza.