LA MUJER DE VIDRIO

Javier Canale nos ofrece un film muy llamativo y bien realizado que nos sumerge en el mundo de la violencia de género en primera persona. Un comienzo inquietante que puede despertar un presagio y el recorrido por la desesperación de una mujer que pudo revelarse frente al maltrato de su novio, pero que se  siente desprotegida. Se vence la perimetral que mantuvo alejado a su pareja  y ella, sin matrimonio legal, deberá alejarse de la casa que ocupa. Pero  también tendrá que aceptar que puede cruzarse con el hombre que la castigo siempre en el corto plazo. Una mujer frágil, atormentada por ese pasado de abuso, que debe soportar sus fantasmas pero también el maltrato masculino habitual de ese pueblo donde se conocen todos y es la que le hizo daño a un pobre hombre. En ese entorno donde la libertad de los paisajes campestres contrasta con su soledad  y torturas psicológicas  deberá sobrevivir y hasta ser sorora.