Un detective con fama de infalible, pero que vive retirado por oscuros secretos y adicciones, es convocado y cuasi obligado a tomar una caso preocupante: La muerte de un cadete en la academia West Point, en un momento en que por circunstancias políticas están a punto de cerrarla. El caso tiene su costado misterioso y ominoso: el joven fue encontrado colgado de un árbol y su cuerpo profanado, falta su corazón, quitado con pericia quirúrgica. Para Christian Bale, en su tercera colaboración con el guionista y director Scott Cooper, que se basó en la novela de Louis Bayard, es la oportunidad de componer un personaje atormentado y escondedor, casi una especialidad. En la academia se encuentra con un estudiante que sobresale por su sagacidad que se llama Edgard Allan Poe y que en el futuro será el famoso escritor y poeta, que interpreta Harry Melling. Todo esta servido para la intriga en este thriller de terror gótico. Sin embargo como en el entorno gélido donde se desarrolla, asi es su ritmo, pero eso no significa que enganchará al espectador a todas las vueltas de tuerca inimaginables. Le falta crescendo dramático pero igual hipnotiza con un caso de difícil camino y muchos sospechosos. En el elenco se reúnen celebridades, Toby Jones, Guillian Anderson, Robert Duvall, Charlotte Gainsburg. Sobresale especialmente la dirección de arte y sugerente y magnífica fotografía de Masanobu Takayanagi.
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